sábado, 22 de agosto de 2015

Cuentos de Edgar Allan Poe: “El gato negro” y “El corazón delator”


En “El corazón delator”: Esta un hombre y un viejo. El hombre esta contando su historia de cómo mato al viejo, como le llevo una semana, porque su intención y miedo no era hacia el viejo, sino hacia su ojo de “buitre”, y del cual sólo quería deshacerse. Pero no lo logro porque fue lo que lo delato y volvió loco cuando los oficiales estaban en su casa y el les dijo que era culpable mostrándoles donde estaba el cuerpo.
En “El gato negro”: Era una pareja. El hombre esta contando igual, tal vez desde la cárcel, los acontecimientos pasados.  Los dos, hombre y mujer, compartían su gusto por los animales, es por eso que tienen varios animales contando un gato negro. Plutón (el gato negro) era el favorito del hombre y siempre lo seguía a todas partes. Las cosas van cambiando cuando el hombre tiene problemas con el alcohol, se vuelve adicto y va cambiando su personalidad, empieza a pegarle a su esposa y a los animales, a excepción del gato negro. Pero se va haciendo más adicto y un día llega a su casa ve al gato y le corta un ojo, después de eso lo ahorca y esa noche tienen que dejar la casa el y su esposa porque se incendio. Al día siguiente encuentran una pared con la imagen de un gato con la cuerda en su cuello.          El hombre sigue con el alcohol y un día en el bar se encuentra a un gato y se lo lleva a su casa, era igual que el primero, lo seguía a todas partes, lo quería, era tuerto, pero en lugar de ser todo negro tenía una mancha blanca sin forma que con el tiempo tomo forma de un patíbulo, para entonces al hombre ya le había desesperado el gato y cuando intento matarlo se interpuso su esposa, pero fue tanta la rabia que mato a su esposa. La emparedo y se sintió libre del que gato no volviera. Cuando los oficiales estuvieron en su casa se delato el solo y se dio cuenta de que el gato estaba con su esposa.
Los cuentos están narrando en primera persona. Pero refiriéndose igualmente al lector, como por ejemplo, en el primer cuento.
“¿Me siguen ustedes con atención? Les he dicho que soy nervioso.”
Y en el segundo:

“Seguía mis pasos con una pertinencia que me costaría hacer entender al lector.”
En que radica el terror en cada  (ejemplificar con citas textuales):
De la forma que describe como se siente el protagonista, lo que siente él y la persona a quien ataca y las palabras que utiliza como “terror”, “horrible”, “terrible”, ”diabólico”, etc.
Entretanto, el infernal latir del corazón iba en aumento. Se hacía cada vez más rápido, cada vez más fuerte, momento a momento. El espanto del viejo tenía que ser terrible. ¡Cada vez más fuerte, más fuerte!” El corazón delator
Las acciones que hace:
“Ante todo descuarticé el cadáver. Le corté la cabeza, brazos y piernas.” El corazón delator
“Fue como si la raíz de mi alma se separara de golpe de mi cuerpo; una maldad más que diabólica, alimentada por la ginebra, estremeció cada fibra de mi ser. Sacando del bolsillo del chaleco un cortaplumas, lo abrí mientras sujetaba al pobre animal por el pescuezo y, deliberadamente, le hice saltar un ojo. “, El gato negro
Una mañana, obrando a sangre fría, le pasé un lazo por el pescuezo y lo ahorqué en la rama de un árbol; lo ahorqué mientras las lágrimas manaban de mis ojos y el más amargo remordimiento me apretaba el corazón; lo ahorqué porque recordaba que me había querido y porque estaba seguro de que no me había dado motivo para matarlo; lo ahorqué porque sabía que, al hacerlo, cometía un pecado, un pecado mortal que comprometería mi alma hasta llevarla -si ello fuera posible- más allá del alcance de la infinita misericordia del Dios más misericordioso y más terrible.”, El gato negro
“Entonces, llevado por su intervención a una rabia más que demoníaca, me zafé de su abrazo y le hundí el hacha en la cabeza. Sin un solo quejido, cayó muerta a mis pies.” El gato negro

La tortura que siente el protagonista:
“¡Oh, Dios! ¿Qué podía hacer yo? Lancé espumarajos de rabia... maldije... juré... Balanceando la silla sobre la cual me había sentado, raspé con ella las tablas del piso, pero el sonido sobrepujaba todos los otros y crecía sin cesar. ¡Más alto... más alto... más alto! Y entretanto los hombres seguían charlando plácidamente y sonriendo. ¿Era posible que no oyeran? ¡Santo Dios! ¡No, no! ¡Claro que oían y que sospechaban! ¡Sabían... y se estaban burlando de mi horror! ¡Sí, así lo pensé y así lo pienso hoy! ¡Pero cualquier cosa era preferible a aquella agonía! ¡Cualquier cosa sería más tolerable que aquel escarnio! ¡No podía soportar más tiempo sus sonrisas hipócritas! ¡Sentí que tenía que gritar o morir, y entonces... otra vez... escuchen... más fuerte... más fuerte... más fuerte... más fuerte!” El corazón delator
“Representaba ahora algo que me estremezco al nombrar, y por ello odiaba, temía y hubiera querido librarme del monstruo si hubiese sido capaz de atreverme; representaba, digo, la imagen de una cosa atroz, siniestra..., ¡la imagen del patíbulo! ¡Oh lúgubre y terrible máquina del horror y del crimen, de la agonía y de la muerte!”Una mañana, obrando a sangre fría, le pasé un lazo por el pescuezo y lo ahorqué en la rama de un árbol; lo ahorqué mientras las lágrimas manaban de mis ojos y el más amargo remordimiento me apretaba el corazón; lo ahorqué porque recordaba que me había querido y porque estaba seguro de que no me había dado motivo para matarlo; lo ahorqué porque sabía que, al hacerlo, cometía un pecado, un pecado mortal que comprometería mi alma hasta llevarla -si ello fuera posible- más allá del alcance de la infinita misericordia del Dios más misericordioso y más terrible.” El gato negro
Las cosas paranormales que pasan y te sorprenden
Las palabras "¡extraño!, ¡curioso!" y otras similares excitaron mi curiosidad. Al aproximarme vi que en la blanca superficie, grabada como un bajorrelieve, aparecía la imagen de un gigantesco gato. El contorno tenía una nitidez verdaderamente maravillosa. Había una soga alrededor del pescuezo del animal.” El gato negro
“¡Que Dios me proteja y me libre de las garras del archidemonio! Apenas había cesado el eco de mis golpes cuando una voz respondió desde dentro de la tumba. Un quejido, sordo y entrecortado al comienzo, semejante al sollozar de un niño, que luego creció rápidamente hasta convertirse en un largo, agudo y continuo alarido, anormal, como inhumano, un aullido, un clamor de lamentación, mitad de horror, mitad de triunfo, como sólo puede haber brotado en el infierno de la garganta de los condenados en su agonía y de los demonios exultantes en la condenación.”  El gato negro
Los dos personajes principales actúan de manera irracional a causa del “ojo” o del alcohol, pero a pesar de sus acciones y de ser consciente de ellas, lo que sienten, viven y hacen es muy racional para ellos, por eso no dicen que no están locos.
 La presencia del “ojo”
En “El corazón delator” el ojo es el temor que tiene el hombre, porque no lo considera humano, sino algo anormal
“Me parece que fue su ojo. ¡Sí, eso fue! Tenía un ojo semejante al de un buitre... Un ojo
celeste, y velado por una tela. Cada vez que lo clavaba en mí se me helaba la sangre. Y así, poco a poco, muy gradualmente, me fui decidiendo a matar al viejo y librarme de aquel ojo para siempre.”
“Acudí a abrir con toda tranquilidad, pues ¿qué podía temer ahora?”
 En “El gato negro” siento que la descripción del segundo gato es de cierta forma un retorno de Plutón para atormentar al hombre.
“Lo que, sin duda, contribuyó a aumentar mi odio fue descubrir, a la mañana siguiente de haberlo traído a casa, que aquel gato, igual que Plutón, era tuerto”

Mesografía:
Textos en :

http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/poe/el_gato_negro.htm http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/poe/el_corazon_delator.htm



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